¿Un estudio de comunicación visual que incorpora criterios ambientales en sus proyectos? Un cartel, un dibujo, ilustraciones… ¿impactan ambientalmente? Pues, está claro. Y más de lo que nos pensamos. Lapage Original es un ejemplo de una empresa que no incorpora la vertiente ambiental en sus propuestas para hacer ‘greenwashing’ o para ‘quedar bien’ o únicamente para ‘ahorrar dinero a largo plazo’; sino que lo hace porque está plenamente convencida que no hay otra manera. Que si no lo hacen bien, el resultado no será el mejor. Empresas que sobresalen en su trabajo, sumando no sólo para sus clientes sino también para el conjunto de la sociedad. Uno de sus últimos proyectos, ‘Un bote, un libro ecoresponsable‘, es un ejemplo de calidad ambiental y belleza gráfica.
Josep Martínez lidera, con Sònia Martínez y Magda Escudero, el equipo de La Page Original. Esta empresa de comunicación visual, constituida en 1991, es la primera del Estado español que tiene la certificación EMAS. La Page tiene un rasgo diferencial: Sus proyectos, además de ser de una gran calidad visual con un diseño gráfico cuidadoso, destacan por su calidad ambiental. Ellos ofrecen soluciones visuales sostenibles. Puede sonar extraño, curioso… pero su trabajo es un ejemplo de esfuerzo y convencimiento para diseñar de manera sostenible, integral y coherente. Forman parte de nuestra serie ecoemprenedors.
La Page es el primer estudio de diseño gráfico del Estado español y uno de los pocos en todo Europa que tiene la certificación EMAS. Esta certificación representa la garantía de nuestro compromiso por la mejora ambiental de nuestros servicios como diseñadores y comunicadores visuales. Nuestra declaración ambiental empieza con una frase de Joan Costa «Más allá de la mirada: la vida» que define la filosofía de nuestro estudio. La misión del diseño es trabajar para crear un entorno visual entendedor, que transmita conocimientos, valores y nos ayude a crear un mundo mejor.
En general, las soluciones sostenibles son una ambición, más que una realidad. La sostenibilidad no es un elemento que se añada, sino una manera diferente de enfocar y desarrollar los proyectos. Estos se piensan, se planifican, se diseñan y se producen bajo criterios sostenibles. Esto pide una revisión del status quo que nos obliga a investigar en cada proyecto, a replantear nuevas opciones, a buscar nuevas soluciones para desarrollar proyectos coherentes entre el qué comunicamos y cómo lo comunicamos. Cuidamos que nuestros proyectos además de ser viables económicamente, no generen conflictos en ninguna de las 3 esferas en las cuales nosotros entendemos la sostenibilidad: ambiental, social y cultural.
Responden de forma muy positiva. Para el cliente es un valor añadido presentar sus trabajos basándose en criterios de sostenibilidad. Los que ya tienen una cierta sensibilidad ambiental, buscan acciones que les den coherencia con su filosofía. No sólo en su parcela ambiental, sino también coherencia en la estrategia de comunicación.La incorporación de estos criterios en nuestra manera de trabajar responde a una actitud de querer hacer las cosas bien sin alterar nuestro entorno. Los primeros beneficiados somos nosotros, los humanos, las personas, puesto que obtenemos un trabajo de mayor calidad, más equitativo, justo, local y respetuoso con el entorno. Todo suma. Además, el cliente también sale ganando. Le aportamos la posibilidad de tener una actitud más positiva hacia la sociedad, cosa que sus usuarios sin duda le reconocen y valoran.
Hemos desarrollado una herramienta para poder valorar el impacto de nuestros proyectos que nos ayuda a conocer los procesos, y a reflexionar y valorar las decisiones que tomamos en el ámbito de la comunicación gráfica.
Esta herramienta de valoración nos muestra los puntos más fuertes y los más débiles del proyecto que estamos realizando. Nuestro método valora diferentes grados del impacto ambiental en las sucesivas fases del ciclo de vida de los proyectos que desarrollamos; y esto nos conduce a una reflexión constante sobre cómo nuestras decisiones creativas inciden en el balance ambiental global. Desde los materiales de origen, hasta su producción, distribución, uso y eliminación final.
Cuando concebimos un producto visual lo pensamos desde un principio para que su impacto ambiental sea mínimo. La elección de los materiales y de los formatos que generan menos residuo, el uso de tintas menos impactantes, la selección de pegamentos más sostenibles, así como otros elementos de acabados o de unión. Y también le damos mucha importancia al mensaje que transmiten nuestros proyectos una vez producidos y distribuidos. En esto somos especialistas, en comunicar mensajes; y no podíamos dejar de explicar que aquel producto ha sido concebido y diseñado de manera sostenible.
Hasta ahora, este balance ambiental ha sido una herramienta interna que no hemos comunicado y que en algunos casos no hemos mostrado a los clientes. A partir de ahora le queremos dar más valor y estamos trabajando en elementos gráficos sencillos e impactantes que muestren el valor ambiental del conjunto del proyecto y permitan que el cliente sea más consciente y lo pueda comunicar si quiere.
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